¡ Hosanna al Hijo de David!

Hosanna en las alturas. ¿Por qué le exaltaba la muchedumbre que le habría de crucificar y cómo se ganó su odio después de haber tenido su favor? En realidad los elogios indicaban también su poder de redimir. Así “Hosanna” en hebreo quiere decir “redención de la casa de David”. Además lo llaman Hijo de David porque reconocen en Él la herencia del reino eterno. Por eso le proclaman también “Bendito en el nombre del Señor”. Más tarde gritarán blasfemando “¡Crucifícalo”! Pero los presentes acontecimientos muestran la imagen de futuro y, aunque los sentimientos de los que participaban en estos sucesos eran contradictorios e incluso los hechos que seguirían fueran distintos, lo que hacían los hombres aun involuntariamente, disponía a crecer en las realidades celestes. Jerusalén, pues, se encontraba conmocionada.

San Hilario de Poitiers.- Sobre el evangelio de Mateo, 21,3.