Esforzaos para entrar por la puerta angosta

El camino para salvarse. “Esforzaos para entrar por la puerta angosta”. Esta respuesta parece un intento de eludir la cuestión. El hombre quería saber si serían pocos los que se salvan, pero Cristo le explicó el camino por el cual se podría salvar él mismo. Dijo: “Esforzaos para entrar por la puerta angosta”. ¿Qué contestamos a esta objeción? Era necesario y valioso saber cómo un hombre podría obtener la salvación. El Señor se mantuvo en silencio voluntariamente respecto a la pregunta inútil. Y afirma lo esencial, es decir, el conocimiento necesario para realizar aquellas obras que la gente necesita para entrar por la puerta angosta.

San Cirilo de Alejandría.- Comentario al Evangelio de Lucas, 99.