Estad alerta y guardaos de toda avaricia

La codicia equivale a idolatría. Jesús no nos deja sin instrucción. Al encontrar una buena oportunidad pronuncia un discurso provechoso y salvífico. Así dice:”Estad alerta y guardaos de toda avaricia”. Nos enseñó que la codicia es una trampa del diablo y odiosa a Dios. El sabio Pablo incluso la llama idolatría, tal vez por ser apropiada sólo para los que no conocen a Dios, o como equivalente en la balanza a la deshonra de quienes prefieren servir a maderos y piedras. Es la trampa de los espíritus malignos, por medio de la cual arrastran el alma de una persona hasta las redes del infierno. Por ello, para prevenirlos El afirma muy bien: “Estad alerta y guardaos de toda avaricia, de lo grande y de lo pequeño y de no defraudar a nadie. La codicia es odiosa a Dios y a la humanidad.

San Cirilo de Alejandría.- Comentario al Evangelio de Lucas, 89.