Tomando los cinco panes y los dos peces

El pan es la palabra de Dios que crece místicamente. Este pan que parte Jesús es místicamente la palabra de Dios y un sermón de Cristo que aumenta mientras se distribuye. Con algunos sermones ha dado a todos los pueblos un alimento sobreabundante, nos ha dado los sermones como panes, y al gustarlos, se multiplican en nuestra boca. Más aún, visiblemente y de una manera increíble, cuando se parte este pan, cuando se lo distribuye, cuando se lo come, permanece intacto sin sufrir ninguna disminución… Los beneficios de Cristo son pocos en apariencias, pero inmenso en la realidad. No los otorga a uno solo, sino a toda la multitud. La comida aumenta en la boca de los que la comen; parece que era un alimento para el cuerpo, pero se tomaba para la salvación eterna.

San Ambrosio de Milán.- Exposición sobre el Evangelio de Lucas, 6,86,88.